¡Nomás esto nos faltaba! que el próximo jueves, el primer jueves de la semana, el cuál también es el primer jueves del mes, o sea el día en que se celebra el aniversario de esa la, casi centenaria, señora que cumple 98 años y no se da cuenta que quienes dicen quererla, lo hacen con la hipocresía de quién se acerca a una mujer mayor de edad para sacarle el “dinero” o de plano quitarle alguna(s) de su(s) riqueza(s). Me refiero a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, o sea, nuestra constitución, la cual con sus estreñimientos y por consecuencia una gran cantidad de pestilentes flatulencias.
Se supone que su servicio doméstico, sus sirvientes, eran el Poder Ejecutivo, la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores y la Suprema Corte de Justicia quienes antes, mucho muy antes de empezar a trabajar para ella juraban “cumplir y hacer cumplir” lo que ella decía; luego, perdida la fecha en el tiempo y aprovechando la sordera propia de la edad, comenzaron a jurar “guardar y hacer guardar” los propósitos y objetivos de aquella quien en sus años mozos fue querida y amada por aquella parte del pueblo conocida como “la plebe” o “la plebada”, (singular y plural del regionalismo de origen sinaloense que significa “niño”, pues para los ricos porfirianos los demás adultos no pueden pensar); ella, la Constitución, les garantizaba: toda la educación –gratuita- (Art. 3°); la restitución a los pueblos y ejidos de las tierras y aguas (Art.27); salarios, jornada de trabajo,(Art.123).
Seguramente, cambiado el origen popular de los sirvientes y alterando el juramento inicial fue que la Constitución se indigestó y le vinieron esos terribles estreñimientos con el olor a corruptencias. Con estos ojos que, no se han de comer los gusanos, pues he pedido a mi familia que cuando muera me hagan crema, he visto y todavía miro:
Qué si la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en el artículo 3° fracción IV está escrito “Toda la educación que el Estado imparta será gratuita:” No lo es, ni lo ha sido. Si mucho la mayoría de los profesores piensan que se refiere a la educación primaria y que además al Estado corresponde el pago de los docentes y que lo demás, que otorgue el gobierno, es una gracia: escuelas de materiales impropios para estos climas, comidas que habrán de pagar los padres, etc. pero, si “la plebada” nos fijamos, la ley dice en dos palabras claves “toda” y “gratuita”, lo principal y lo cual es lo que siempre los gobiernos han tratado de ocultar y/o tergiversar. Para atraer la atención de las autoridades educativas los ciudadanos siempre tuvimos la solución, gradualista, primero se fundaba una escuela de carácter “particular”; luego, se hacían trámites para que la escuela fuera “por cooperación” y de esa manera los padres de familia continuaban pagando pero, un poco menos, porque el gobierno aportaba una parte del gasto total y; al final el pago total, del gasto al gobierno. Sin embargo, los docentes no somos ajenos a los valores de nuestra sociedad (poder y dinero). Analicemos el caso de la Preparatoria Central de Ciudad Juárez, los directivos y los padres de familia no empujaron para que dejase de ser preparatoria federal por cooperación, el gobierno deja de hacer su aportación y las colegiaturas para los alumnos aumentan, a mi ver, hay que aumentar las percepciones de las autoridades de este subsistema.
El último párrafo de la fracción VII del artículo 27 de la Constitución Política de los estados Unidos Mexicanos, todavía dice lo que en 1997 decía “La restitución de tierras, bosques y aguas a los núcleos de población se hará en los términos de la ley reglamentaria”. Sin embargo, ha sufrido tantas modificaciones que en su momento impidieron que se cumpliera.
En el artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en la fracción en la fracción VI establece entre otros puntos que: “Los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer educación obligatoria a sus hijos. Los salarios mínimos profesionales se fijarán considerando, además, las condiciones de las distintas actividades económicas…” Y uno se pregunta ¿Por qué no se establecen topes a los vergonzantes salarios máximos e ingresos que reciben los altos funcionarios electos y designados? ¿Por qué será que ninguno de los precandidatos ha publicado su declaración patrimonial, aunque alguna autoridad partidaria lo haya solicitado? ¿Por qué no se muestran los principios de los partidos políticos en los que disputan dentro de un mismo partido político una candidatura?
La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en nuestro sistema legal es la “ley máxima” en su alrededor habrían de girar las decenas o cientos de leyes reglamentarias y/o constituciones estatales. No creo que alguien sepa el total de artículos que suman entre todas. Lo que me pregunto es si ese número corresponde a cada muerto en la Revolución Mexicana o si el número de artículos
¿o es mayor o menor a cada disparo realizado en aquella lucha armada?
Para coronar este tema, cambian las fechas con anuencia de las autoridades y autorizan un desfile cual carnaval.
“Defendamos el ecosistema del Río Casas Grandes”
JuárezDialoga ha invitado a Jorge Domínguez González a colaborar por su compromiso con la educación y las causas justas. Jorge es profesor egresado de la Escuela Normal Superior “José E. Medrano”. Jorge Domínguez es también un reconocido poeta de la entidad. Su trabajo se puede encontrar en www.tolvaneras.blogspot.com donde dice que es un blog que “intenta ser un espacio de reflexión” con sus “apreciaciones de los procesos de enseñanza aprendizaje que se realizan en la subsede” de la Universidad Pedagógica Nacional ubicada en Nuevo Casas Grandes, Chihuahua.